Un turista de bienestar es una persona que busca relajación y viaja para escapar de las
tensiones y ansiedades de la vida diaria. Dichos turistas también tienen la intención de rejuvenecer y mejorar su salud sin la intervención y supervisión de un médico. Estos turistas generalmente no sufren ninguna enfermedad física en particular, y en su mayoría buscan beneficiarse del poder curativo de la naturaleza y escapar de las tensiones, ansiedades, contaminación y el ajetreo de la vida cotidiana. Una de las atracciones y privilegios más importantes de Irán para el turismo de bienestar son las aguas terapéuticas, hasta el punto de que actualmente hay más de mil manantiales minerales en Irán. Otras atracciones del turismo de bienestar incluyen el desierto, la selva, la montaña y las villas y hoteles costeros.
Los servicios relajantes de spa, uñas y belleza, y las terapias de masaje son otras instalaciones que las personas pueden disfrutar en un ambiente de relajación y tranquilidad en un ambiente limpio y saludable. El uso de aguas termales y aguas minerales se remonta a miles de años atrás, por lo que en los libros de personajes famosos, como Aristóteles, Hipócrates y Platón, hay materiales a este respecto.
Debido a sus minerales y propiedades específicas, las aguas termales pueden curar muchas enfermedades de la piel y dolores musculares y eliminar los gérmenes y bacterias del cuerpo. Es interesante saber que la ingesta calórica de un descanso de una hora en agua de 40 grados es igual a una caminata de media hora. Este tratamiento se denomina científicamente calentamiento inactivo, y se prescribe para aquellos que no realizan una actividad física considerable. En este método, su azúcar en la sangre y su peso también disminuyen. Sin embargo, las propiedades curativas de las aguas termales y minerales dependen de las condiciones físicas y químicas, así como de la temperatura y los diversos gases radiactivos del agua en las aguas termales.
Las aguas termales importantes de Irán incluyen: